Hola, soy Alicia. Si has llegado hasta aquí buscando una dieta de cajón, una lista de alimentos prohibidos o a alguien que te riña por saltarte el guion, probablemente no soy la nutricionista que buscas.
Pero si buscas a alguien que te acompañe a entender por qué comes como comes y a reconciliarte con tu cuerpo desde la calma, entonces bienvenida. Estás en casa.
Mi camino hasta la consulta no fue una línea recta. Durante años, me dediqué al mundo del turismo. Mi trabajo consistía en ayudar a las personas a descubrir nuevos destinos, a maravillarse con lo externo.
Sin embargo, viajando y conociendo a tanta gente, me di cuenta de algo fundamental: el viaje más importante es el que hacemos hacia nuestro interior.
Vi cómo muchas personas (incluida yo misma en algunas etapas) descuidaban su «templo» mientras intentaban disfrutar del mundo. Esa curiosidad me llevó a dar un giro de timón y formarme en Nutrición y Dietética.
Cambié los mapas geográficos por los mapas metabólicos y emocionales. Y descubrí que mi vocación real no era planificar vacaciones, sino planificar bienestar de vida.
Hoy, uno esa empatía y apertura mental que me dio el viajar con la ciencia de la nutrición para ofrecerte un enfoque diferente: flexible, humano y sin fronteras rígidas.
Para poder cuidar de los demás, primero necesito cuidarme yo. Y mi bienestar no solo viene de comer verduras; viene de desconectar, de disfrutar de placeres sencillos y de seguir explorando el mundo con curiosidad.
Aquí te cuento qué me da energía cuando no soy «Alicia la nutricionista».
